Tercera y última conferencia incluida en la programación del ciclo El año artístico 2025. El investigador Rafael Sanz analiza la figura de Alejandro Ferrant y Fischermans, pintor y miembro de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.
En Alejandro Ferrant Fischermans, pintor, se describen las vidas personal y artística de Alejandro Ferrant, uno de los grandes maestros de la pintura del siglo XIX. Actualmente es un gran desconocido, no solo por el gran público sino también por una gran parte del mundo artístico, y eso a pesar de su importante producción pictórica y sus importantes desempeños en la España artística de entonces.
De antepasados baleares y alemanes, Alejandro nace en Madrid en 1843 y fallece en la misma villa en 1917.
Estudia en la Escuela de Nobles Artes de San Fernando bajo la tutela de su tío y padrastro Luis Ferrant, compaginando sus estudios con su incipiente carrera pictórica y la participación en los primeros certámenes artísticos, como los de la Academia de Cádiz. Se traslada con su familia durante tres años a Roma, donde destaca por su virtuosismo, plasmado en el conocido como Entierro de san Sebastián, que le vale la Medalla de Primera Clase en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1878. Su producción es mayoritariamente decorativa, pintando los muros de, entre otros, la iglesia de San Francisco y los palacios madrileños de Elduayen, de Linares y de Fomento. Es también un magnífico acuarelista y sus bocetos nos muestran la viveza y armonía de sus colores y la maestría en el trazo del dibujo; una gran parte de estos se recopilan en este libro y nos trasladan esa espontaneidad de sus primeras ideas y trazos previos a la obra final.
Alejandro compatibiliza su carrera artística con la docente pues durante casi toda su vida es profesor de la Escuela de Artes y Oficios de Madrid, lo cual le permite estar en contacto con sus discípulos y obtener un complemento económico estable a sus ingresos artísticos, más
variables y discontinuos. Además, es un activo y discreto miembro de la vida artística española: miembro de comisiones y jurados, así como director del Museo de Arte Moderno desde finales del siglo XIX hasta su muerte en 1917.
En su carácter destacan la sencillez, la bondad, la prudencia, el amor por la familia y el intenso espíritu religioso, que se plasma en muchas de sus obras, pero de una manera agradable y atractiva, lejos de convencionalismos más dramáticos o manidos.
Este libro pretende hacer una semblanza completa de su vida y obra y, a partir de ella, reivindicar el merecido reconocimiento público que su personalidad y producción artística merecen.
Rafael Sanz Gómez
Investigador e ingeniero Superior de Telecomunicaciones