Academia

Las artes y los confinamientos en los siglos XX y XXI

La vitalidad de las artes y su capacidad para ser un constante referente de las vicisitudes humanas, se demuestra no sólo por su brillante expansión en tiempos de bonanza sino por su capacidad para crear, inventar nuevas propuestas y generar esperanza en los tiempos de máxima dificultad.

A lo largo de la historia las artes han sobrevivido, e incluso se han robustecido, en medio de guerras, persecuciones, censuras, pestes, encierros y toda clase de obstáculos, que también han llegado hasta tiempos recientes en los siglos XX y XXI. Hemos asistido a dictaduras terribles, a encierros de grandes poblaciones, pandemias, hundimientos globales de la economía, a decenas de acontecimientos adversos en los que las artes no sólo no han desaparecido, sino que se han fortalecido respondiendo a su manera a los retos de exterminio que las circundaron.

La idea de este ciclo de conferencias y conciertos que emprenden la Fundación BBVA y la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando es dar cuenta de las diversas respuestas que todas las artes han dado en los tiempos más oscuros, por motivos variados, del siglo XX y de lo que llevamos del siglo XXI. La razón más próxima en el tiempo, aquella que justifica una reflexión profunda desde múltiples perspectivas, también desde el ámbito de las artes, ha sido, desde luego, el contexto de la pandemia que aún vivimos; la indeleble y reciente memoria que nos han dejado los episodios más duros del confinamiento, un encierro al que más de la mitad de la población del planeta se ha visto sometida en algún momento de los últimos dos años. Un periodo de sombras, traducidas en alejamiento social y dramas personales, de cuya esperanza de superación emana la luz que han generado las manifestaciones culturales y creativas de muy distinta índole.

Seis conocidos expertos, todos ellos miembros numerarios de la Real Academia, exponen la manera en que cada una de las artes de sus respectivas especialidades han sabido florecer en las circunstancias más adversas. Complementan a las conferencias dos conciertos con obras escritas en diversos tipos de confinamiento, desde la guerra a la pandemia, para mostrarnos como el espíritu humano es capaz de superar los peores momentos y responder en todos ellos a la necesidad de crear un arte vivo y capaz de superar sus circunstancias.

Tomás Marco
 
 

Programa de conferencias

MIÉRCOLES 14 DE SEPTIEMBRE, 19:30 h / FUNDACIÓN BBVA
Víctor Nieto Alcaide
Gestos de una rebeldía en la pintura bajo el franquismo
  1. Durante la guerra civil española se desarrolló una importante actividad propagandística a través del arte. Desde el punto de vista oficial, Guernica de Picasso, pintado para el pabellón español en la Exposición Internacional de París de 1937, eclipsó de forma casi absoluta todas las demás realizaciones. En la postguerra continuaron activas ciertas estrategias de modernidad con ejemplos relevantes en los años cuarenta. A finales de los cincuenta y principios de los sesenta se inició una “politización” de determinados planteamientos de la vanguardia, al identificar como una forma de libertad, protesta y oposición política la agresividad del lenguaje pictórico. Algunos referentes del Informalismo, como Canogar, pasaron a realizar una obra figurativa comprometida con la libertad y la crítica de la represión y lo mismo sucedió con la obra de Genovés. Otros grupos como Estampa Popular desarrollaron, a través del grabado, una actividad de crítica política y social. Sus obras, orientadas hacia un análisis crítico de la situación, no correspondían a los planteamientos formales de la vanguardia sino a una subordinación de la actividad artística a la eficacia política. Otros colectivos, como El Grupo Crónica, canalizaron la acción política y social mediante un lenguaje vanguardista en el que se aprecian formas del Pop y de los medios de comunicación de masas. Todas estas tendencias desaparecieron con el advenimiento de la democracia, pero no la actividad de sus principales protagonistas que continuaron escribiendo un nuevo capítulo de la modernidad.
 
JUEVES 15 DE SEPTIEMBRE, 12:00 h / SALA GUITARTE DE LA ACADEMIA
Alfredo Pérez de Armiñán y de la Serna
Patrimonio y conflicto
  1. Desde el comienzo de la historia, los monumentos y las obras de arte han sido objeto de destrucción, vandalismo, pillaje y expolio en los conflictos bélicos, bien por su valor material o bien por su significación simbólica. Este fenómeno se amplió durante la Edad Contemporánea, a partir de las guerras napoleónicas, debido a las características de la guerra moderna –que puede afectar a toda la población y al territorio de los países afectados en su integridad– y debido también a la progresiva extensión de la noción del patrimonio cultural. Las reacciones ante ello han sido muy variadas, desde actuaciones de defensa “in situ” o de traslado a otros lugares especialmente resguardados de los ataques, hasta la restauración o recuperación de los bienes culturales expoliados. Desde comienzos del siglo XX, y especialmente a partir del fin de la II Guerra Mundial, se han establecido normas internacionales para la protección de los bienes culturales en caso de conflicto, promovidas por la UNESCO. No obstante, estos sistemas de protección han sido puestos a prueba en los conflictos armados más recientes (antigua Yugoslavia, Afganistán, Iraq, Siria, Mali, Libia, Yemen, Ucrania).
 
MIÉRCOLES 21 DE SEPTIEMBRE, 19:30 h / FUNDACIÓN BBVA
Tomás Marco Aragón
Música confinada
  1. A lo largo del siglo XX y primer cuarto del XXI, la música ha sufrido confinamientos de todo tipo y con motivos diversos. Uno, desgraciadamente habitual, ha sido la guerra, que ya en la primera contienda mundial obligó a un cambio de rumbo radical en las composiciones de Stravinsky, pero que en la segunda llegó a dar ejemplos desde obras compuestas en campos de prisioneros, como es el caso de Messiaen, a otras en ciudades sitiadas como ocurrió con Leningrado y Shostakóvich. Entre ambas, dos confinamientos singulares: el económico del crack del 29, que tuvo sus consecuencias musicales, y el establecimiento de los totalitarismos, que prohibió y alentó músicas diferentes y que provocó obras como la de Ullmann compuestas en campos de exterminio. Y entre guerras y totalitarismo, los confinamientos y persecuciones del exilio. El más reciente de los confinamientos musicales se dio de repente y sin sospecharlo, en una pandemia mundial de consecuencias amplísimas. Un momento en que los compositores han respondido también desde el confinamiento, llevándolo a los pentagramas y que incluso ha influido sobre las maneras de manifestarse sonoramente y las nuevas vías de difusión. De algún modo, los antiguos y tradicionales jinetes del Apocalipsis –guerra, peste, hambre y muerte– han configurado los diversos confinamientos modernos, a los que los creadores sonoros han sabido responder con sus nuevas obras.
 
JUEVES 22 DE SEPTIEMBRE, 12:00 h / SALA GUITARTE DE LA ACADEMIA
Publio López Mondéjar
Fotografía y testimonio
  1. Desde los días del daguerrotipo, las imágenes capturadas por las cámaras se convirtieron en apreciados recursos visuales por su condición de testimonio de la realidad. De hecho, su propia cualidad testimonial fue la que potenció el rápido y espectacular desarrollo del medio. Gracias a su capacidad para documentar la realidad, la fotografía comenzó a adquirir una nueva dimensión social. Al despojarse de sus limitaciones mecánicas, abandonó definitivamente su carácter ritual para conquistar un territorio propio de representación que le distinguía de todos los lenguajes conocidos hasta entonces. Esta conferencia abordará la relevancia y significación del carácter documental de la fotografía en España, la practicada por los profesionales que sólo aspiraban a ejercer honestamente su oficio en momentos de adversidad social y personal, tratando de dejar testimonio mediante el reportaje o el documento, como pedía el maestro André Kertész. Para ello será analizada la obra de fotógrafos tan comprometidos con la realidad social como Alfonso, Santos Yubero, Luis Escobar y Virxilio Viéitez, quienes nunca sintieron la necesidad de maquillar la realidad y cuyas imágenes no sólo son fragmentos de memoria sin impostura, sino que ayudan a aquella a definirse, convirtiendo en realidad lo que ya no existe pero constituía la forma de comunidad en momentos complejos, no tan lejanos en el tiempo. Dos retratistas y dos reporteros, cuyo testimonio resulta indispensable para acercarnos a la historia de la fotografía y a la propia historia española.
 
MIÉRCOLES 28 DE SEPTIEMBRE, 19:30 h / FUNDACIÓN BBVA
Fernando Lara
El cine como testimonio silenciado
  1. Desde que el cine nació como atracción de feria, muchas fueron las voces que trataron de acallarlo. Las prohibiciones gubernativas ante el frecuente incendio de los barracones de madera se sumaban a las mentalidades biempensantes que veían en él un factor de corrupción moral, en especial de la juventud. Tardó tiempo en que el cine fuese considerado realmente el “séptimo arte”, como proclamara en 1911 el escritor futurista italiano Ricciotto Canudo, y que se extendiera su poderío como medio de expresión. Poder que conllevó al tiempo el intento de reprimirlo por parte de regímenes autoritarios, que veían en él un indudable peligro para sus fines. Las películas sólo eran contempladas como elementos de propaganda y cualquier obra que se saliera de ese canon debía ser perseguida o, cuando menos, ignorada. La historia de la censura sobre el cine constituye un relato de la infamia política contra el nuevo arte. Toda la capacidad de las imágenes, ya sean de carácter documental o de ficción, para convertirse en testimonio de los conflictos, preocupaciones, búsquedas y deseos de una sociedad quedaba así cercenada por quienes se sentían poseedores de la verdad sobre el bien y el mal. Pero pese a tantos mecanismos represivos, el cine ha salido siempre, a veces con enorme esfuerzo, vencedor de una pugna que quizá nunca tenga fin porque, en realidad, es un factor más de la lucha por la democracia.
 
JUEVES 29 DE SEPTIEMBRE, 12:00 h / SALA GUITARTE DE LA ACADEMIA
Pedro Navascués Palacio
Arquitectura en tiempos de tribulación
  1. Siendo la arquitectura expresión que requiere un tiempo largo de proyecto y ejecución, su extinción paradójicamente se produce de modo inmediato y su recuperación exige un tempo lento, recompensada, en ocasiones, con la posibilidad de una reparación moral colectiva. Partiendo del libro del Génesis, donde aparece la construcción de la Torre de Babel, en un momento históricamente confuso, asistimos a una realidad construida y a la formación de una imagen utópica en la memoria colectiva. Entre estas referencias bíblicas no cabe obviar el libro del Apocalipsis y el significado de sus Cuatro Jinetes que, como dolorosa y extendida pandemia, señala la guerra como principal agente destructor. Pero no se trata de hacer un penoso repaso de la historia de la guerra y sus efectos en el campo de la arquitectura sino de tomar como referencia los siglos XX y XXI, cuando surge una nueva sensibilidad hacia los bienes culturales que, de forma despiadada, liquidó irremisiblemente la II Guerra Mundial. Como respuesta, la UNESCO propició la Convención para la Protección de los Bienes Culturales en Caso de Conflicto Armado, fruto de la conferencia celebrada en La Haya en 1954. Se expondrán algunos episodios representativos en orden cronológico. Sea, inicialmente, el caso modélico de la destrucción de la catedral de Coventry (Inglaterra) y su nuevo templo en 1950; el conflicto de los Balcanes en los años 90 del pasado siglo, con el incendio de la Biblioteca Nacional de Sarajevo en 1992 y la voladura del Puente de Mostar en 1993; lo acaecido con el patrimonio sirio e iraquí en 2015-2017. Como punto final, el bombardeo del Teatro de Mariúpol (Ucrania) en este mismo año 2022.

La Fundación BBVA y la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando presentan un ciclo de seis conferencias y dos conciertos que reflexionan sobre la creación artística y musical en el contexto de los procesos desencadenados por las tragedias contemporáneas. El ciclo se ofrece con secuencia alterna en las sedes respectivas de la Fundación BBVA y de la Academia, es decir, cada sede acoge tres conferencias y un concierto.

Programa de conciertos

MIÉRCOLES 5 DE OCTUBRE, 19:30 h / FUNDACIÓN BBVA
Trío Arbós
Ferdinando Trematore (violín), José Miguel Gómez (violonchelo), Juan Carlos Garvayo (piano)

Joan Enric Lluna (clarinete)
  1. Tomás Marco (1942). Musica in tempore viri (2021)
  1. Olivier Messiaen (1908-1992). Quatuor pour la fin du Temps (1940)
  2. I. Liturgie de cristal
  3. II. Vocalise, pour l’Ange qui annonce la fin du Temps
  4. III. Abîmes des oiseaux
  5. IV. Intermède
  6. V. Louange à l’Éternité de Jésus
  7. VI. Danse de la fureur pour les sept trompettes
  8. VII. Fouillis d’arcs-en-ciel, pour l’Ange qui annonce la fin du Temps
  9. VIII. Louange à l’Immortalité de Jésus
  
SÁBADO 8 DE OCTUBRE, 12:00 h / SALÓN DE ACTOS DE LA ACADEMIA
Coro Nur
Alfonso Martín (director)
  1. Consuelo Díez (1958), Francisco Otero (1940), Joaquín Medina (1955), José Luis Greco (1953), Jaime Santoyo (1980) y Beatriz Arzamendi (1961). Réquiem por las víctimas del covid
  2. I. Introitus [C. Díez]
  3. II. Kyrie [C. Díez]
  4. III. Graduale [C. Díez]
  5. IV. Dies irae I y II [F. Otero]
  6. V. Absentium in memoriam [J. Medina]
  7. VI. Offertorium [J.L. Greco]
  8. VII. Sanctus [J. Santoyo]
  9. VIII. Pie Jesu [B. Arzamendi]
  10. IX. Agnus Dei [B. Arzamendi]
   
Olivier Messiaen. Quatuor pour la fin du Temps

Durante la segunda guerra mundial, Olivier Messiaen prestó sus servicios en el ejército francés como enfermero. Cayó prisionero de los alemanes y fue deportado a un campo de concentración próximo a Görlitz (Silesia). “Cuando estuve prisionero”, comentaba el compositor, “la desnutrición me ocasionaba sueños coloreados: veía el arco iris del Ángel del Apocalipsis y extraños remolinos de colores”. En tiempos y en situación apocalípticos, Olivier Messiaen, en los días finales de 1940 y primeros de 1941, creó este monumento sonoro, una de las obras esenciales del siglo XX y de la música de cámara de todas las épocas, una de las cimas de expresión humanística por vía musical, cargada de espiritualidad y abandonada a las creencias del músico francés en el más allá.

 Si inaudito es imaginar la situación en que fue compuesto el Cuarteto para el fin del Tiempo (o “de los tiempos”, como suele traducirse), más conmocionante aún resulta imaginar lo que debió ser el evento del estreno en el propio campo de concentración, el 15 de enero de 1941, rodeados los músicos por una multitud de alrededor de cinco mil prisioneros. Según relató Messiaen, “el frío era atroz, el stalag estaba cubierto por la nieve. Los cuatro instrumentistas tocábamos instrumentos rotos: el violonchelo de Etienne Pasquier no tenía más que tres cuerdas, las teclas de mi piano vertical se bajaban y ya no volvían a subir. Nuestras vestimentas eran inverosímiles: se me había ataviado con una chaqueta verde completamente desgarrada y llevaba zuecos de madera”. Tocaron en aquella histórica ocasión Henri Okaka (clarinete), Jean Le Boulaire (violín), Etienne Pasquier (cello) y Olivier Messiaen (piano). Estos dos últimos, con el violinista Jean Pasquier y el clarinetista André Vacellier, dieron la primera audición del Quatuor pour la fin du Temps en París, en junio de 1942.

El cuarteto al completo es explotado en los movimientos 1 y 6, y se requiere también, aunque sea episódicamente, en los movimientos 2 y 7. El número 3 es el memorable, genial, solo de clarinete que contiene el infinito –pues parece carecer de principio y de fin– crescendo sobre una nota tenida que es un logro increíble de expresividad, lograda a partir de las cualidades físicas del sonido y psico-fisiológicas de la escucha. El Interludio situado como cuarto movimiento es un trío de violín, violonchelo y clarinete. Por fin, los movimientos 5 y 8 son dúos para violonchelo y piano y violín y piano, respectivamente.
 
Tomás Marco. Musica in tempore viri

Durante el confinamiento al que nos abocó la pandemia en 2020, Tomás Marco aprovechó el tiempo dedicándose de lleno a aquello que seguramente es lo más “suyo” de cuanto hace, o sea, a componer. Así nació primeramente el Sueño de la razón viral, título de reminiscencias goyescas, una obra de vídeo con electrónica que inmediatamente se difundió a través de youtube. Pero Marco había recibido un encargo de composición del Festival de Granada y en aquellos momentos tan especiales se planteó llevar a cabo una obra instrumental “que expresara la rara relación con el tiempo y el espacio entonces vivida”. Éste es el origen de su Musica in tempore viri.

En más de una ocasión he afirmado que Tomás Marco es el más inspirado “titulador” de todos los compositores de su tiempo, y aquí tenemos una muestra más, con la alusión de este título al de la hermosa Misa in tempore belli de Haydn. La nueva composición de Tomás Marco se estrenó en el Patio de los Mármoles del Hospital Real de Granada el 15 de julio de 2021, en versión del clarinetista José Luis Estellés y el Trío Arbós. Como se ve, la plantilla instrumental de Musica in tempore viri es la misma que la del Quatuor pour la fin du Temps de Messiaen ya que, en palabras del propio Marco, “comparte con ella otros tiempos difíciles, pero no se basa en ella más que en la situación de partida en momentos de zozobra”. Elegir en nuestros días la combinación instrumental de clarinete, violín, violonchelo y piano lleva benditamente aparejada la posibilidad de que se programe junto al Cuarteto de Messiaen, como sucedió en el estreno granadino y sucede hoy, en su estreno en Madrid.

Refiriéndose a su Musica in tempore viri, explica Tomás Marco: “Todas las combinaciones posibles de uno, dos, tres y cuatro instrumentos se engarzan en un complejo de relaciones, que tratan de crear una estructura abstracta sobre el tiempo y el espacio sonoros, que expresen las cambiantes emociones de una reclusión y de una real amenaza invisible. No asistimos a un final de los tiempos, pero quizá sí a una renovación de ellos”.

José Luis García del Busto
El Departamento de Filosofía y Humanidades de la Facultad de Ciencias Humanas y Sociales de la Universidad Pontificia de Comillas organizó, en colaboración con la Plataforma Artística, Científica, Tecnológica y Humanística y en estrecho contacto con la Asociación de Compositores Sinfónicos Españoles (ACSE), la composición y estreno de una obra coral colectiva, sobre los textos litúrgicos de la misa de réquiem, obra titulada Réquiem por las víctimas del covid. Las compositoras y compositores encargados fueron Consuelo Díez (Introitus, Kyrie yGraduale), Francisco Otero (Dies Irae), José Luis Greco (Offertorium), Jaime Santoyo (Sanctus) y Beatriz Arzamendi (Pie Jesu Agnus Dei), más Joaquín Medina, quien compuso una pieza electroacústica (Absentium in memoriam) que se intercala hacia el centro de la obra.

La idea surgió de un encuentro entre los profesores Valero y Pinilla y el maestro Otero y, para el montaje y estreno de tan original propuesta, se contó con el Coro Nur, conjunto fundado en noviembre de 2007 por iniciativa de José Manuel López Blanco con el objetivo de difundir la música coral de los siglos XX y XXI. El estreno absoluto de este Réquiem que se repone en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando tuvo lugar en Madrid, en la iglesia de la Inmaculada y de San Pedro Claver, el 23 de noviembre de 2021, bajo la dirección de Alfonso Martín, quien asumió este arduo trabajo por enfermedad del maestro López Blanco, director titular del Coro Nur quien, no obstante, pudo asistir como espectador y recoger su parte en el gran éxito que tuvo esta honda y emocionante propuesta musical en la que, en palabras de Francisco Otero, “los compositores han renunciado a su propio yo para lograr un nosotros”.

Después de un dulce y bellísimo Introitus, Consuelo Díez integra un leve movimiento y el sonido de las pisadas de los cantores en la interpretación del Kyrie y completa su aportación con un sutil Graduale, de escritura vocal muy exigente.

La sequentia del Dies Irae, característica de la misa de réquiem, es la parte más abierta a la expresión dramática y hasta al tremendismo en la historia de los réquiem y también contiene el momento más propiamente humano de la misa de difuntos, el Lacrymosa. En esta obra colectiva, el Dies Irae lleva música de Francisco Otero, quien ha optado por un estilo introspectivo y recogido, se diría que contenido dramáticamente.

Hacia el centro de la obra –entre el Dies Irae y el Offertorium, o bien entre el Offertorium y el Sanctus– se intercala la pieza electroacústica Absentium in memoriam, original de Joaquín Medina. Lejos de “chocar” en el seno de una composición coral, el trabajo de Medina actúa muy eficazmente como intermedio puramente sonoro que abre un espacio a la meditación.

El Offertorium de José Luis Greco recorre procedimientos corales diversos, desde el susurro hasta la plenitud polifónica, incluyendo efectos vocales, en un discurso muy bello y especialmente emotivo.

Más tradicional de escritura es el sobriamente expresivo Sanctus de Jaime Santoyo, cantor y compositor, que da paso a las páginas finales del Réquiem, que son obra de Beatriz Arzamendi: el Pie Jesu es de trazo muy sutil, rico en expresivas disonancias; en el Agnus Dei, efectos corales y muy comprometidos solos tejen un curso sonoro de alta exigencia para los intérpretes y que cumple bien su función de término y culminación de esta singular composición colectiva.

José Luis García del Busto
 
Catedrático emérito de Historia del Arte en la Universidad Nacional de Educación a Distancia. Miembro del Comité International d'Histoire de l'Art. Presidente del Comité español del corpus Vitrearum Medii Aevi. Miembro correspondiente de la Hispanic Society de Nueva York y de las Academias de Santa Isabel de Hungría de Sevilla, San Jordi de Barcelona, La Purísima de Valladolid, San Quirce de Segovia y Real Academia Canaria de San Miguel.

Delegado del Museo de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando entre 2004 y 2009 y desde 2021 a la actualidad. Académico Archivero-Bibliotecario de 2016 a 2021. Ha sido director de las revistas Fragmentos y Reales Sitios.

En 1999 obtuvo el Premio Nacional de Historia por su libro La vidriera española. Ha dedicado su actividad investigadora al estudio del arte renacentista y al análisis de la vidriera española, y también ha prestado una atención especial al arte contemporáneo.
Académico de Número de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, en su calidad de jurista especializado en la protección y gestión del patrimonio cultural.

Letrado de las Cortes Generales desde 1977, ha desempeñado numerosos cargos en el área cultural, entre ellos los de Presidente del Patrimonio Nacional (2015-2020), Director General Adjunto de Cultura de la UNESCO (2014-2015), Secretario General de la Fundación Colegio Libre de Eméritos (2002-2012), Presidente de la Asociación Hispania Nostra (2003-2011), Patrono del Museo del Prado (1993-2003 y 2015-2020), Director Gerente de la Fundación Caja Madrid (1996-2002), Secretario General Técnico y Director General de Bellas Artes, Archivos y Bibliotecas del Ministerio de Cultura (1981-1982).

Desde 2020 es Vicedirector-Tesorero de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. En 2021 fue condecorado por Real Decreto con la Gran Cruz de Isabel la Católica.
Director de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando desde 2020.

Estudió violín y composición, además de formarse en Derecho. Amplió sus estudios musicales en Francia y Alemania con los maestros Bruno Maderna, Pierre Boulez, Karlheinz Stockhausen, György Ligeti y Theodor Adorno, entre otros. Continuó su formación realizando cursos de psicología, sociología y artes escénicas. En 1967 fue ayudante de Stockhausen en sus investigaciones sobre música electroacústica, aleatoria y composición serial. Profesor de Nuevas Técnicas del Real Conservatorio Superior de Música de Madrid y de Historia de la Música en la Universidad Nacional de Educación a Distancia. Ha dictado cursos en instituciones y universidades europeas y americanas, y ejercido la crítica musical en distintos medios.

Como compositor es autor de siete óperas, un ballet, diez sinfonías, música coral, música de cámara, música incidental para teatro, audiovisual, etcétera. No menos destacada es su trayectoria como ensayista, con títulos de referencia como Música española de vanguardia (1970), Pensamiento musical y siglo XX (2002) o la ambiciosa Historia cultural de la música (2008).

Trabajó once años en los servicios musicales de Radio Nacional de España, recibiendo el Premio Nacional de Radiodifusión y el Premio Ondas. De 1981 a 1985 fue director gerente de la Orquesta y Coro Nacionales de España, y entre 1991 y 1995 director técnico de las citadas agrupaciones. Entre 1985 y 1995 dirigió el Centro para la Difusión de la Música Contemporánea, creando su laboratorio de electroacústica. Director de las once primeras ediciones del Festival Internacional de Alicante. Ha sido consejero de la Sociedad General de Autores y Editores (1977-1996), director de festivales de la Comunidad de Madrid (1996) y director general del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM) desde 1996 a 1999. En 1998 obtuvo el título de doctor honoris causa por la Universidad Complutense de Madrid. Ha recibido numerosos premios y reconocimientos, entre ellos el Premio Nacional de Música en 1969, el premio de la Fundación Gaudeamus (Holanda) en 1969 y 1971, la VI Biennale de París (1969), el trofeo Arpa de Oro de Composición (1975), el galardón del Centenario de Pau Casals (1976) o el premio de la Tribuna Internacional de Compositores de la UNESCO (1976). En 2002 fue reconocido con el Premio Nacional de Música por el conjunto de su obra compositiva y al año siguiente con el Premio de Música de la Comunidad de Madrid, que en 2012 le otorgó la Gran Cruz de la Orden del Dos de Mayo. En 2014 obtuvo la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, y en 2016 el Premio Iberoamericano de la Música ‘Tomás Luis de Victoria’.
Académico de Número de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando por la sección de Nuevas Artes de la Imagen. Uno de los primeros historiadores de la fotografía en España, López Mondéjar es actualmente el fotohistoriador español de mayor prestigio. Licenciado en periodismo, inició su trabajo profesional en la revista Sábado Gráfico y en los periódicos Triunfo, Pueblo, Informaciones y Madrid. Fue corresponsal en Londres de la revista Criba y fundador de la revista Emigrante. En 1978 inició su trabajo en el campo de la fotohistoria y en 1980 publicó su libro Retratos de la vida, primero en su género editado en España.

Ha publicado numerosas obras que tienen por objeto la historia gráfica de los dos últimos siglos a través de magníficas selecciones fotográficas. Entre ellas Crónica de la Luz, fotografía en Castilla-La Mancha, 1855-1936 (1984), Historia de la fotografía en España (1997 y 2005), Ciento cincuenta años de fotografía en España (1998), Madrid laberinto de memorias (1999), Luis Escobar, fotógrafo de un pueblo (2001) o La memoria del tiempo, fotografía y sociedad en Castilla y León (2011). En 1989 inició la edición de la tetralogía Las Fuentes de la Memoria: fotografía y sociedad en la España del siglo XIX (1989), Fotografía y sociedad en España 1900-1939 (1992)y Fotografía y sociedad en la España de Franco (1996). Ha sido comisario de diversas exposiciones, entre ellas, El rostro de las letras: escritores y fotógrafos en España desde el Romanticismo hasta la generación de 1914 (2014) o Galdós en el laberinto de España (2020).

Su trayectoria ha sido reconocida con diferentes galardones como el premio de los Encuentros Internacionales de Fotografía de Arlés (1997), el Premio especial del Ministerio de Cultura (1999 y 2002) o el Premio especial de la Sociedad Europea de Historia de la Fotografía (2000).
Periodista y escritor, comenzó su extensa trayectoria en la crítica cinematográfica con colaboraciones en las revistas Nuestro cine, Tiempo de Historia, La Calle yTriunfo, donde aportó un método de análisis innovador, intuitivo y riguroso. Entrevistó, junto a Diego Galán, a dieciocho personajes relevantes del cine nacional, cuyos testimonios se publicaron periódicamente en Triunfo y más tarde fueron recopilados en el libro 18 españoles de posguerra. Otras publicaciones suyas son 7 trabajos de base sobre el cine español (1975), Valle-Inclán y el cine (1986) y Miguel Mihura, en el infierno del cine (1990).

Director de la Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci) desde 1984. Director general del Instituto de Cinematografía y de las Artes Visuales (ICAA) en 2004, periodo en el que elaboró la Ley del Cine (2007). Asesor de la Asociación de Distribuidores Cinematográficos Independientes (ADICINE) y colaborador habitual de las revistas Academia, Caimán, Fotogramas, Turia o El Norte de Castilla.

Ha recibido el Premio del Observatorio d´Achtall, el Premio Especial del Festival CyLnema, es Caballero de la Orden de las Artes y las Letras de Francia y ha obtenido la Espiga de Oro de Honor de la Seminci (2015). Académico de Número de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando (2021).
Catedrático de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura, Universidad Politécnica de Madrid, donde ha ejercido la docencia desde 1964. Profesor emérito de la UPM (desde 2012).

Académico numerario de las Reales Academias de San Fernando (Madrid), de Barcelona, Sevilla, Valladolid, Málaga, Cádiz, Tenerife, Toledo y Segovia. Doctor Honoris Causa por la Universidad de Coimbra (Portugal). Miembro de la Hispanic Society of America de Nueva York.

Es uno de los principales historiadores de la Arquitectura española y máximo experto en siglo XIX. Autor de más de doscientos artículos y libros referidos a la historia del patrimonio arquitectónico, entre ellos, Arquitectura y arquitectos madrileños del siglo XIX (1973), Catedrales de España (1990), Arquitectura española 1808-1914 (1993), Espacios en el tiempo: doce catedrales españolas (1996), Monasterios en España: arquitectura y vida monástica (2000), Monasterios en Castilla y León (2006), Arquitectura postal: correos y telégrafos (2015)…
Premio Nacional de Música 2013, el Trío Arbós se fundó en Madrid en 1996, tomando el nombre del célebre director, violinista y compositor español Enrique Fernández Arbós (1863-1939). En la actualidad es uno de los grupos de cámara más prestigiosos del panorama musical español.

Su repertorio abarca desde las obras maestras del clasicismo y el romanticismo (integrales de Mozart, Beethoven, Schubert, Mendelssohn, Schumann, etc.) hasta la música actual. Desde su formación en 1996, uno de los principales objetivos del Trío Arbós ha sido la contribución al enriquecimiento de la literatura para trío con piano a través del encargo de nuevas obras. Compositores de la talla de Georges Apeghis, Ivan Fedele, Toshio Hosokawa, Luis de Pablo, Mauricio Sotelo, Jesús Torres, Bernhard Gander, José Luis Turina, José María Sánchez Verdú, César Camarero, José Manuel López López, Hilda Paredes, Aureliano Cattaneo, Gabriel Erkoreka, Roberto Sierra, entre otros, han escrito obras para el Trío Arbós.

El Trío Arbós actúa con regularidad en las principales salas y festivales internacionales a lo largo de más de treinta países: Konzerthaus de Viena, Conservatorio Tchaikovsky de Moscú, Academia Sibelius de Helsinki, Wittener Tage für neue Kammermusik, Teatro Colón de Buenos Aires, Auditorio Nacional de Madrid, Festival de Kuhmo, Bienal de Venecia, Festival de Spoleto, Musica Festival de Estrasburgo, Philarmonie de Berlín, Festival Klangpuren, Ultima de Oslo, Time of Music de Viitasaari, Nuova Consonanza de Roma, Festival Casals de Puerto Rico, Festival Transart de Bolzano, Festival de Sintra, Quincena Musical Donostiarra, Festival Internacional de Música Contemporánea de Alicante, Festival Internacional de Granada, Semana de Música Religiosa de Cuenca, etc. 

El Trío Arbós ha realizado más de veinte grabaciones para sellos como Naxos, Kairos, Col Legno, Verso, Ensayo, Fundación Autor e IBS Classical, dedicadas a Joaquín Turina, Jesús Torres, César Camarero, Gabriel Erkoreka, Luis de Pablo, Mauricio Sotelo, Roberto Sierra y otros muchos compositores españoles e iberoamericanos. Ha grabado para Kairos el triple concierto Duración invisible de César Camarero con la Orquesta Nacional de España dirigida por Peter Hirsch y el Triple concierto de Roberto Sierra con la Orquesta Sinfónica de Xalapa y el maestro Lanfranco Marcelletti. La prestigiosa revista Gramophone ha dicho de su aclamado disco Play it again: “Este disco reafirma las credenciales del Trío Arbós como uno de los grupos de cámara más completos y orientados al futuro de la actualidad”.

Durante cuatro temporadas el Trío Arbós se estableció como conjunto en residencia del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía de Madrid. Su proyecto Triple Zone, para la ampliación y difusión de la literatura para trío con piano, ha sido patrocinado por la Ernst von Siemens Musikstiftung y por la Fundación BBVA y es conjunto en residencia del Festival Música Sur de Motril.
Joan Enric Lluna compagina su labor como clarinetista con la dirección de orquesta y la docencia.

En su faceta de director y solista-director, Lluna se ha puesto al frente de orquestas como la Luzerne Festival Strings, Manchester Camerata, la OCV del Palau de les Arts, la Covent Garden Chamber Orchestra, la Orquesta de Valencia, la Real Filharmonia de Galicia, y dirigió los conciertos del 30 aniversario de la Orquesta de Cadaqués en el Palau de la Música de Barcelona. También ha dirigido los vientos de la Scottish Chamber Orchestra y en abril de 2019 hizo su debut en la sala de cámara de la Filarmónica de Berlín y en la sala Karl Philip Emmanuel Bach de Frankfurt al frente de la Berliner Camerata.

Como solista ha actuado en los principales escenarios europeos, bajo la dirección de maestros como Zubin Mehta, Gianandrea Noseda, Juanjo Mena y Neville Marriner, y en grupos de cámara como los cuartetos Brodsky, Tokio y Alexander o solistas como Lluís Claret, Tasmin Little y Josep Colom. Es el primer clarinete de la Orquesta de la Comunidad Valenciana, conjunto titular del Palau de las Artes Reina Sofía, desde que fue escogido por Lorin Maazel para asumir esta responsabilidad en 2006. También es primer clarinete de la Orquesta de Cadaqués, de la que es cofundador. Fue primer clarinete de la Bournemouth Sinfonietta entre los años 1996 y 1999, y como primer clarinete invitado, ha actuado con formaciones entre las que se incluyen la London Philarmonic y la Royal Philharmonic Orchestra, la Academy of St. Martin in the Fields y la Chamber Orchestra of Europe.

Lluna es el impulsor y director del grupo de cámara Moonwinds, integrado por instrumentos de viento y que reúne intérpretes de primer nivel. Además, desde el año 2009 dirige el Festival Internacional “Residencias de Música de Cámara” de Godella (Valencia).

Lluna ha interpretado gran parte del repertorio para clarinete solista y estrenado conciertos de compositores como Sir John Tavener, J. Guinjoan, César Cano, Jesús Torres, Mauricio Sotelo, Isidora Zebeljan, Paul Barker o Sánchez Verdú. Así mismo, a lo largo de su trayectoria ha estrenado numerosas obras de cámara de compositores como J. Torres, I. Zebeljan, P. Barker, D. Del Puerto o H. Khoury. Recientemente ha estrenado conciertos escritos para ser interpretados como director-solista de Isidora Zebeljan y Jesús Torres, así como el estreno en España de Il Angelo Necessario de Mauricio Sotelo con la OBC. Ha grabado jazz impact, dedicado a Leonard Bernstein y Benny Goodman, y los conciertos y sinfonías de C. M. von Weber con la Berliner Camerata para Ibs Classical.

Entre su discografía cabe destacar, además, sus tres grabaciones del Concierto para clarinete K622 de Mozart, con los directores Sir Neville Marriner (Tritó) y Anthony Pay (Cala Records) y con la Bournemouth Sinfonietta. También ha grabado con los cuartetos Brodsky, Tokio y Alexander, y tiene cinco discos dedicados a la música española, publicados por Harmonía Mundi y Clarinet Classics. El último de ellos está dedicado a los músicos exiliados en la guerra civil española (Tritó, 2015). Con Moonwinds ha grabado la Gran Partita, las Serenatas para vientos de Mozart, Una cosa rara y un disco dedicado a divertimentos inéditos de Martín y Soler. El CD Le jour de l’an (Ibs Classical) con Moonwinds, dedicado a compositores exiliados en la guerra civil española fue nominado para los premios Carles Santos de la Música.

Joan es profesor en la Escola Superior de Música de Catalunya (Barcelona), en el Trinity College of Music de Londres, y es invitado con regularidad a impartir clases magistrales y recitales en importantes instituciones musicales, como la California State University, Royal College y Royal Academy de Londres o la Royal Scottish Academy of Music de Glasgow.
El Coro Nur fue fundado en noviembre de 2007 por iniciativa de su director original, José Manuel López Blanco, con el objetivo de difundir la música coral de los siglos XX y XXI. Los aproximadamente veinticinco cantores que lo forman cuentan con larga experiencia coral, particularmente en música contemporánea. La actividad del Coro ha sido constante y variada, tanto en proyectos individuales como en colaboración con otros coros, formaciones musicales y proyectos de vanguardia de diversa índole, destacando los múltiples estrenos absolutos de diferentes compositores españoles. Entre estas actividades cabe señalar la participación en varias ediciones del Festival de Música Contemporánea de Madrid (COMA), en el Ciclo Clásicos en verano y en el Festival de Arte Sacro de la Comunidad de Madrid. Además, colabora desde 2015 en el proyecto Cosmos Coral con el grupo instrumentista Cosmos 21, dirigido por el catedrático y compositor Carlos Galán. Ha obtenido diversos premios en concursos corales nacionales. En 2014 el Coro Nur editó el disco NUR. Estrenos de música coral contemporánea. Desde noviembre de 2022 el director del Coro Nur es Alfonso Martín.
Estudia piano, canto, composición, dirección de orquesta y coro en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid. Posteriormente amplía estudios en Eslovenia y Croacia, así como con J. López Cobos, A. Ros Marbà y G. Pehlivanian, B. Aprea, L. Ramos, J. Bernácer, Josep Vila y M.A. García de Paz, entre otros.

Paralelamente a su formación, es escogido como director asistente en formación de la Orquesta Filarmónica de Eslovenia (Academia Philharmonicorum). Asimismo, es becado durante dos años por la JONDE como integrante en calidad de director en formación.

En el ámbito coral ha trabajado durante más de veinte años en el Coro del Teatro Real de Madrid, Coro de la Comunidad de Madrid (ORCAM), Coro de RTVE, Coro Nacional del España (OCNE), así como en numerosos conjuntos especializados en música antigua y contemporánea, a las órdenes de los principales directores nacionales e internacionales. En la actualidad, como director coral es frecuentemente invitado por éstas y otras agrupaciones profesionales. Por otra parte, colabora como director y formador de coros no profesionales (entre otros, el Coro Nur).
 

Información

  • Ciclo ‘Las artes y los confinamientos en los siglos XX y XXI
  • Sede de la Fundación BBVA (Palacio del Marqués de Salamanca, Paseo de Recoletos 10)
  • Conferencias: miércoles 14, 21 y 28 de septiembre
  • Concierto: miércoles 5 de octubre
  • 19:30 horas
  • Acceso gratuito, aforo limitado
  • Solicitud de asistencia (solo para las conferencias y el concierto en la Fundación BBVA): confirmaciones@fbbva.es
  • Sala Guitarte y Salón de actos de la Academia (Alcalá 13)
  • Conferencias: jueves 15, 22 y 29 de septiembre
  • Concierto: sábado 8 de octubre
  • 12:00 horas
  • Entrada libre y gratuita hasta completar aforo (sin necesidad de solicitud de asistencia)
 
  Programa completo del ciclo. Folleto (1,5 Mb)  

Te puede interesar

Scroll al inicio