Museo

Comparece: España

Prorrogada hasta el 5 de enero de 2013
La exposición “Comparece: España. Una historia a través del notariado” conmemora el 150 aniversario de la Ley Orgánica del Notariado.

Esta exposición, de la que es comisario el historiador Fernando García de Cortázar Ruiz de Aguirre, está organizada por el Consejo General del Notariado y la Fundación Dos de Mayo, Nación y Libertad, y reúne por primera vez piezas esenciales a través de las que se muestra cómo la función de la figura del notario –garantizar y certificar actos jurídicos– ha estado presente desde tiempos inmemoriales.

La exposición está constituida por una magnífica compilación de obras de arte y documentos históricos que nunca hasta la fecha han sido exhibidos conjuntamente. Incluye piezas de enorme valor histórico, documental y artístico procedentes del Museo Nacional del Prado, el Museo Arqueológico Nacional, el Museo de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, la Biblioteca Nacional, Patrimonio Nacional o el Archivo Histórico Nacional, así como de Colegios notariales, archivos de protocolos, bibliotecas jurídicas y otras entidades públicas y privadas.

Entre las ciento treinta piezas que conforman la exposición destacan téseras romanas, relieves y estatuas egipcios, matrices sigilares medievales, pinturas de Alonso Cano o Goya, y documentos notariales como los testamentos de Felipe II, Carlos III, Calderón de la Barca y Lope de Vega, entre otros.

Tiene, además, un gran interés didáctico, ya que ofrece una programación complementaria que incluye visitas comentadas y dinamizadas, talleres escolares y actividades para el público familiar. En la web www.compareceespaña.es se ofrece una visita virtual por los contenidos de la exposición.

La necesidad de dar seguridad a los actos jurídicos ha existido desde que surgen las primeras civilizaciones en los albores de la historia de la humanidad. Desde los más sencillos acuerdos entre particulares, pasando por los trueques comerciales o el reparto de herencias y propiedades, con el tiempo se fue haciendo necesaria la intervención de alguna figura que diera confianza, seriedad y tranquilidad a las personas implicadas y que garantizara que el acuerdo sería seguro y no tendría ningún tipo de riesgo.

De la misma forma, se fue buscando algún signo o documento de referencia que sirviera de prueba del acto acordado, para que perdurase en la memoria de los contratantes y para que pudiera ser conocido públicamente por las demás personas.

Celebración contractual
Así, se fue dando forma a un tipo de celebración contractual, en la que participaban los contratantes y la figura que cumplía el papel de lo que posteriormente se ha conocido como notario, y a la que asistían otras personas para dar testimonio de su presencia en el acto, pues la testificación fue uno de los primeros métodos para dar seguridad a los contratos.
Existen numerosos antecedentes documentados que ilustran las diferentes prácticas de la actividad notarial a lo largo de la historia, pero es a finales de la Edad Media cuando se sientan realmente las bases de la institución notarial como la conocemos en nuestros días. Y serán juristas españoles e italianos los que van a jugar un papel protagonista en esta labor de reorganización de los diferentes cuerpos legales para definir claramente y por primera vez las funciones de los notarios modernos.

En el caso de nuestro país, se consideran documentos fundacionales en este sentido, el Fuero General de Jaca y el Fuero Real de Castilla, que en 1255 otorgaron a la carta sellada por notario la máxima autoridad, y Las Siete Partidas, de Alfonso X el Sabio, que considera la labor notarial como una función pública.

La aplicación de estas normativas se mantuvo en España hasta la aprobación en 1862 de la Ley del Notariado, que contenía los principales principios de la función notarial que todavía hoy, un siglo y medio después, continúan vigentes, como el reconocimiento de la función pública y el control de la legalidad que ejercen los notarios; la separación de la fe pública judicial y la extrajudicial, atribuyendo ésta última al notariado; la organización jerárquica del colectivo y su dependencia del Ministerio de Justicia; la demarcación de distritos para la actuación de cada notario; la selección para el ingreso por el sistema de oposición; la retribución por arancel fijo, establecido por el Gobierno, y el reconocimiento de la propiedad estatal sobre los protocolos que custodian los notarios.

Con esta visión en su concepto de partida, la exposición “Comparece: España. Una historia a través del notariado” presenta un paseo didáctico por la historia del notariado. A través de diferentes salas y áreas temáticas, los visitantes pueden disfrutar de un amplio y atractivo recorrido en el que están presentes diversos documentos, libros y piezas de valor histórico y artístico vinculados directamente con la temática de la exposición.

Se da relevancia al importante papel que tienen los archivos notariales para conocer mejor la historia de España, pues en ellos se encuentran valiosísimos documentos referidos a señalados momentos históricos de nuestro país, y también sobre la vida privada de grandes personajes y de personas anónimas que aportan detalles indispensables para reconstruir la vida cotidiana de cada época. Es el caso del testamento de Isabel la Católica, donde se afirma que quiso tener tres hijos para que uno de ellos fuera heredero de las Españas, otro arzobispo de Toledo y el tercero, notario de Medina del Campo.

Horario

Martes a sábado: 10 a 14 horas y 17 a 20 horas.
Domingos y festivos: 10 a 14 horas

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